domingo, 28 de septiembre de 2008

De lo "social-democrata" a la "social democracia"

"Los conceptos parecen confundirnos, amigo mío, en tanto en cuanto social demócrata instiga a rememorar aquellos movimientos socialistas que aparecieron en el siglo XIX... Nosotros nos definimos como sociales democráticos, no como socialdemocratas puesto que es tarea de la sociedad dar vida a la hermosa y no perfecta maquinaria de la democracia, y nosotros somos sociedad". Así me respondía a la pregunta ¿qué es USDE? uno de sus, tal vez, brillantes fundadores. USDE, por tanto, nace como ímpetu social por la participación activa en la vida política, en la constitución como asociación próximamente. A la pregunta de qué tipos de ideologías, qué tipos de corrientes podría encontrar en USDE, él, con un tono un tanto solemne me afirmó sin reparos: Por supuesto, todas aquellas que se correspondan a un baremo mínimo, y este, no es más que el de la democracia y su defensa, como defensa a la sociedad a la que pertenece... Me dijo entusiasmado: "Mira Iván, encontrarás social-demócratas, liberales, gente que milita en muchos partidos políticos, pero todos con algo en común, la defensa de la democracia como valor máximo y la tolerancia como punto fundamental para el diálogo". De esto hace ya algo más de tres años y entusiasma que algo así siga siendo correspondido y tenga una vocación de futuro formal que derribe las fronteras ideológicas en busca de lo que verdaderamente importa, que no es más que el bien común. De este modo, USDE se establece o entra en la vida política como ideología madura, que supera los extremos de dos grandes ideologías y pone al servicio de la sociedad una ideología renovada, madura y dinámica... con un fin común, ser la voz de la sociedad. 
En breve, USDE celebrará su III Congreso Nacional. En él se establecerán los principios para constituir un fuerte movimiento social en busca del bien común, en busca de una actuación política serena, correcta, y entusiasmada. USDE es un barco que no va conducido al naufragio, es un barco en el que cabemos todos, es un poder hacer que nuestra voz, como ciudadanos que somos, tome parte en el juego democrático. 

Iván M.Ferrer